Día 360,

ESCUCHAR DUELE
 

No sé si voy a ser capaz de explicarlo. Escuchar la radio ahora es tremendamente doloroso. Y no por como lo cuentan los compañeros, que lo siguen haciendo de lujo. Sino porque lo hacen en un entorno hostil.

Entorno hostil, pero más aún que siempre.

Hay cosas que no cambian, en la web tortuga de la empresa se sigue maltratando la programación de Onda Madrid (ayer, por poner un ejemplo, podíamos leer que a las 21:00 horas había música cuando lo que estaba previsto era la restransmisión de la Final de la Copa de Europa de Baloncesto - me encanta decir Copa de Europa - con un madrileño en juego) . El retardador, un aparato que permite retardar el audio de la narración en la radio para sincronizarla con la imagen de la tele, sigue esperando  arreglo o sustitución. Escuchar , por poner un ejemplo, el baloncesto y verlo por la tele a la vez, es una auténtica tortura. Y admiro a todos los oyentes que optan por apagar la tele, a los que optan por apagar la radio, les entiendo.

A lo de siempre, unimos desidias nuevas. Además de la falta de personal, que se nota y mucho, porque bastante tienen los que quedan con llegar a todo. Y de hecho, no llegan, y hay que cubrir partidos de primera división con personal colaborador de Madrid al Tanto. (Tremendamente barato para la empresa, el partido) . Además de eso, hacer un especial con 3 hombres/mujeres orquesta ya lo dice todo. Una Final de la Copa de Europa, ya no es lo que era en Onda Madrid. 

La publicidad es tremendamente casposa. Por mucho que paguen hay unos mínimos exigibles de calidad y duración del anuncio, mínimos que han decidido pasarse por el forro. Sigo admirando, y mucho a los oyentes que son capaces de quedarse oyendo Onda Madrid. 

Si la empresa está agonizando en vez de darle auxilio le están poniendo las manos en el cuello y aprentado para que no respire. 

Se hace duro escuchar Onda Madrid, y no sólo por los recuerdos, sino por el maltrato. 

Buen Dia.