Hoy no tengo ganas.
En esta historia hay personajes y personajillos. Actores con papeles principales y actores con papeles secundarios. Pero muchos, ausentes hasta ahora, tendrán su papel protagonista en breve. Unos saldrán en un lado de la foto y otros al otro lado, pero el retrato es perfecto.
Es lo que tiene el tiempo que, como bien dicen, pone a cada uno en su sitio.
Hoy no tengo muchas ganas de escribir, no lo voy a negar. Hoy es de esos días en los que recuerdas las ausencias , días en los que la rabia te corroe, días en los que dejarías a un lado la paciencia y pondrías a cada uno en su sitio a lo bestia, sin esperar la labor del tiempo. Por eso, mejor respirar y esperar.
Cuando empecé a escribir este diario , no sabía hasta donde iba a llegar, intuía que la cosa iría para largo pero, obviamente, no sabía que iba a contar un ERE, este ERE, tan en primera persona. Muchas veces me pregunto ¿hasta cuándo voy a seguir escribiendo?. No sé la respuesta, voy decidiendo día a día.
Nunca me sentí representada. Participé en muchas de las huelgas en defensa de los 925, pero no lo hice guiada por ninguna corriente. Lo hice porque creía y creo que hay que luchar de alguna manera contra el despido atroz , que se iba a cometer y se cometió. Lo volvería a hacer y eso que siempre creí que el llevar a negro la tele, o al silencio la radio, no nos favorecía.
Nunca me sentí representada, ni estando dentro, ni estando fuera. La radio siempre fue obviada. Y si encima de trabajar en la olvidada radio, lo hacías en deportes, pues ya sabes "diferentes afortunadamente".
Es cierto, hoy mejor no escribo. Hoy mejor me muerdo las ganas de ....
Buen Día .
P.D.: Gracias Blas, COMPAÑERO.
(Texto "Mi Final Four")
(Texto "Mi Final Four")
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