miércoles, 9 de enero de 2013

Día 236,

Estoy bien, dentro de lo que cabe. Lo explico antes de que me leas porque intuyo que te va a surgir la duda.

Tardaron 235 días en firmar la sentencia de muerte. 235 días mareando la perdiz para acabar con el trabajo de 861 personas (y pico). Aunque leáis en alguna publicación 860, son/somos 861 (y pico) y hay redondeos que JODEN. Ese "uno"puedo ser yo o uno de los míos . Y aunque parezcan números son personas, historias, vidas. Y hasta yo misma soy injusta cuando digo "y pico", les pido perdón, pero es mi manera de tenerles presentes. Porque no me olvido de Alfonso, Rosa, Núñez , Jesús ...

Ayer me preguntaba Miguel por cómo quedaba ésto ahora. Ojalá lo supiera. No lo sé. Nadie me ha contado completo el guión de este drama del que soy/somos tan protagonista. Por lo que intuyo en las cartas que ambas partes nos han ido mandando (y hablo de la radio - perdóname Felipe) eso significa asesinar a todo el departamento de exteriores. Y partir en dos al departamento de deportes: unos fuera y otros dentro. Pero ojo , la agonía puede ser lenta. Porque "todo depende del periodo de ejecución que elija la empresa". Ejecución es la palabra ideal. Se puede dar el caso de que estemos días, meses ... esperando saber quienes son los elegidos para uno u otro lado, y mientras tendremos que seguir trabajando (¡a joderse!).
Además hay que sumar todo el tiempo que los procesos judiciales puedan relentizar e incluso detener este drama.

Yo haría mi propio ERE , siempre lo he dicho. Pero ahora no es momento de eso. Ahora lo que toca es defenderse de esta barbarie. Y lo haré con uñas y dientes, esté dentro o fuera (como lo he hecho hasta ahora). Y lo doy por hecho, estaré /estaremos muy sólos en la defensa . Estaremos solos dentro digo, porque fuera sólo puedo decir una cosa : G R A C I A S.

Buen día.

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