Día 241,

Tengo miedo de mirar el teléfono , a alguno más de los míos les puede llegar la carta de despido hoy. Sé que los quedan lo están pasando mal. (Cuando digo los que quedan me refiero a los COMPAÑEROS de deportes de Onda Madrid). Intuyo que habrán dormido poco y mal hoy. ¿Qué digo intuyo?, LO SE. Tendrán que pasar el horror de la lista otra vez. Por lo que sabemos, falta gente de deportes de la RADIO por despedir injusta, cruel y cobardemente. Y las dudas, nos asaltan ¿quién se sumará a la lista de la vergüenza hoy?, ¿será hoy?. Sé que todos lo están deseando. Todos pagan facturas, pero aguantar en esas condiciones no está pagado. Una cosa es remar y otra es aguantar tanta mierda.

Hay cosas que sé y me tengo que callar porque mi despido ya está en manos de un abogado. Puede que me haga una lista de las cosas que ahora no puedo decir y algún día las cuente. Y no me refiero, por ejemplo, a que se emitiera un programa enlatado mío justo 3 horas después de yo saber por carta que YA estaba despedida. Ni siquiera, que se emitiera cuando había un paro convocado que no pude ni elegir secundar o no, claaaaaaaro, ya no trabajaba allí. Hay muchas cosas que me callo porque las diré ante el juez.

Vuelvo a mis COMPAÑEROS, a los que hoy acuden al trabajo (a los de deportes digo y algún técnico también) sin saber para qué van o qué se van a encontrar. Para ellos TODO MI APOYO Y FUERZA. Si a alguno lo arrojan hoy de la patera, sabe que aquí en el agua le acogemos en nuestro yate. Pero ojo, te tienen que arrojar, no tires tú.

¿Sabéis lo que os digo? Que cuando recibes la carta tienes paz. Sé que es injusto y no me lo merezco. Sé que es una hijoputada que nadie me lo dijera, que me enterara por carta que mis "servicios prestados" se pagaban así. Pero siento una PAZ inmensa aquí en la cubierta del yate.

Buen Día.